SimulacroSimulacro exitoso en el Aeropuerto Ecológico de Galápagos
En el simulacro de accidentes aéreo se observaron y evaluaron los tiempos de respuesta para atender emergencia de los diferentes actores.
Por cerca de 90 minutos se puso a prueba el Plan de Emergencia del Aeropuerto “Seymour” de Baltra. Observadores y evaluadores siguieron de cerca las actividades que incluían el rescate de tripulantes y pasajeros luego de que se simulara un accidente aéreo en la pista de aterrizaje.
Participó toda la comunidad aeroportuaria, directivos y empleados del Aeropuerto, MIEMBROS DEL MINISTERIO DE SALUD y de Turismo, el Cuerpo de Bomberos, Policía Nacional, Capitanía Seymour, Base Aérea Baltra, Petrocomercial, ECU911, líneas aéreas, Alcaldía de Santa Cruz, entre otras instituciones. Así también, se contó con la valiosa participación de 130 estudiantes y 5 docentes de la “Unidad Educativa Miguel Ángel Cazares”, quienes se prepararon, junto a todo el equipo, con un mes de antelación para la efectiva ejecución de este simulacro.
Se instalaron dos equipos de trabajo, el primero compuesto por los organismos de socorro que actuaron en el sitio donde ocurrió el supuesto accidente y el segundo, se instaló en la oficina de Comando de Operaciones de Emergencia (COE), desde donde se dirigió y coordinó el operativo, liderados por la Autoridad Aeronáutica.
Organizaciones como el ECU 911 dispuso el arribo y apoyo de bomberos de Puerto Ayora, ambulancia y médicos del cantón, así como el Helicóptero de la Armada desde Puerto Baquerizo Moreno.
El simulacro contó con la presencia de funcionarios de los aeropuertos de Guayaquil, Quito y Cuenca que participaron como observadores.
Una vez terminado el simulacro se realizó la evaluación que determinó que la respuesta frente a la emergencia fue la adecuada y que se cumplieron con todo los protocolos requeridos para este tipo de situaciones, recomendando mantener y fortalecer los mecanismos de coordinación con todos los actores involucrados con la actividad aeroportuaria. Estos ejercicios deben de realizarse cada dos años.
El Aeropuerto Ecológico de Galápagos comprobó con éxito que su personal y toda la comunidad aeroportuaria que lo acompaña están listos para atender una emergencia adecuadamente y con prontitud.